La llama no se Apaga

Corría el mes de marzo de 1982, una de esas noches tibias de otoño que suelen caer en la provincia de Entre Ríos. Miguel estaba en su casa cuando le llego una carta que le calo en los huesos... Se lo llamaba a servir a su patria, en el escrito lo citaban a presentarse en la dependencia de la II Brigada Aérea en Paraná donde el había echo la colimba hasta el año anterior.
Este muchacho con sus noveles 18 años no sabia ni a donde lo iban a mandar ni en que, ni cuando, se encontraba en un estado de incertidumbre total. La familia a pesar de la tristeza de verlo partir muy, pero muy adentro sentía ese Orgullo de que su hijo marchara a un lugar desconocido a pelear por su país.
El lunes a primera hora estaba en la puerta de la brigada con su bolsito en la mano, pelo prolijamente cortado y un cigarrillo que se consumía como los nervios consumían a Miguel. Volvía al servicio militar; pero desconocía totalmente que estaba pasando, esa misma noche, después de que los juntaran en las barracas, charlaran con ellos algunos suboficiales y oficiales, se les diría que partirían esa misma noche para el su.. corría el 31 de marzo. Dentro del grupo de los que habían vuelto estaban: "el negro" Perez, "el gordo" Eder, entre otros. Cuando la noche se fue adentrando, empezaron a charlar entre conocidos a ver a donde irían o que era lo que sucedía. Uno comento:- Nos vamos para Malvinas. El silencio se apodero de la barraca, nadie dijo nada, si era ir para Malvinas los enemigos eran Ingleses y a pesar de la confianza que estos muchachos tenían la joda era grande.
A las 2 de la mañana estaban todos juntos en la barraca acomodando las bolsas de rancho con sus pertenencias y limpiando el armamento, cuando los cuatro motores del Hércules pre anunciaron la llegada del voluminoso avión a la brigada. Uno de los mas chicos del grupo, soltó el fusil se arrodillo en el piso y empezó a llorar la imagen partió varios espíritus mientras al mismo tiempo otros trataban de consolarlo sabiendo que ese llanto estaba bien infundado y que a donde iban no los recibirían con serpentinas y abrazos.luego de unos minutos emprendían la caminata por la plataforma hasta el avión.
Miguel tenia un F.A.L con 4 cargadores, sus abrigos, parte de una carpa, todo lo necesario para ir a aquellas heladas latitudes, igualmente cuando la mañana del 2 de abril el avión toco suelo malvinense todo el abrigo se hizo poco, el frió entraba por donde fuera y para colmo de males al cavar las trincheras en la turba, a 20 cms brotaba agua. Miguel después de cavar su pozo al costado del aeropuerto, donde pasaría horas y por supuesto estaba lleno de agua, se encontraba encargado de un antiaéreo de 35mm por lo que su estadía en los primeros días fue relativamente tranquila, la comida no era para nada abundante ni mucho menos, faltaban elementos de todo tipo a veces, que se suplían con ingenio por que otra no quedaba.
Pero la cuestión se puso álgida a partir del 1ro de mayo cuando los ingleses empezaron con las incursiones Aéreas esa mañana del 1ro, Miguel dentro de su pozo sintió temblar todo, los Piratas habían llegado y descargaban bombas y balas como confites sobre el aeropuerto era una imagen que solo en películas había visto. Los Harrier casi rozando el prado y el fuego que parecía brotar de las entrañas de la tierra pero no se amilano, agarro su casco su fusil y corrió hasta llegar a su cañón que estaba a 40 metros, los 40 metros mas largos de su vida, junto con un Correntino a pusieron todo a punto y en pocos mitos estaban complicándoles la vida a ingleses que llegaban desde el aire.
La situación era casi surrealista pero en el momento que por su cabeza cruzaba este pensamiento un avión paso ametrallando la zona y uno de sus compañeros que tenia posición a unos 30 metros suyo, voló en mil pedazos. La bronca mezclada con tristeza, odio y resentimiento se hizo carne los suboficiales que tanto jetoneaban en los días previos parecían haber desaparecido en medio del ataque solo esos que matenian un buen trato con el soldado y oficiales que tenían las pelotas puestas, ese día estuvieron codo a codo defendiendo el aeropuerto, mediando la tarde las pulsaciones bajaron y para la noche una cierta tranquilidad había en la zona. Esto era el principio de un mes donde los días eran todos calcados por la mañana temprano las incursiones inglesas y el cañoneo naval barrían con todo a su paso, se dormía y se comía poco y nada, las botas tenían agujeros de todos los tamaños y los compañeros eran cada vez menos.
Pero si mayo fue duro Junio fue de mármol, las cosas se pusieron bravas Miguel había bajado un par de kilos, la comida llegaba poco, conciliar el sueño era imposible, fue herido por metralla dos veces y había visto morir 4 compañeros, ya para esa altura la tristeza por dentro parecía no terminar nunca, para colmo los ingleses barrían con todas las defensas y estaban cada vez más cerca. las noches eran eternas preguntándose por que estaba allí a los 18 años, por que le había tocado ir a el... y la respuesta era siempre la misma; esto lo hago por mi familia, por mi país y por mi mismo, no puedo permitirme no volver a el continente.
La mañana del 12 fue particularmente dura una patrulla inglesa llego a los limites del aeropuerto el infierno se desataba otra vez y las balas parecían bengalas colando por los aires, desde el pozo Miguel junto con el negro Perez lograron arrimarse a un cañón de 20 milímetros, lejos de utilizarlo como arma antiaérea pusieron los cañones al ras del suelo y abrieron las compuertas del mismísimo infierno para los ingleses, ese bicho escupía balas a lo bestia, la patrulla retrocedió pero era cuestión de horas para que volvieran, eso no se dudaba. Y la cosa sucedió así nomas a la noche un grupo muy nutrido de piratas entro en la zona de nuevo apoyado esta vez por morteros y y misiles, el caldo estaba cada vez más espeso, el F.A.L de Miguel no tenia mas balas la mag que estaba en su pozo estaba quedándose sin municion, nuevamente recurrieron al cañón para apoyar a quienes estaba en la primera linea de fuego, nuevamente abrieron fuego sobre los ingleses apoyados también por un par de lanzacohetes. Cuatro ingleses se acercaron rápidamente hacia la posición de Miguel y Perez y el Correntino, y rompieron fuego con un lanzacohetes. La granada reventó contra el cuerpo de Perez, hiriéndolo muy gravemente, y arrojando a Miguel unos metros hacia delante con cinco heridas en la cabeza producidas por las esquirlas. Como un acto reflejo tomó la MAG, pero estaba inutilizada. Al mismo tiempo se acercó un grupo de ingleses para rematar a los soldados, pero el soldado argentino se hizo el muerto; los británicos se percataron de sus movimientos y soltaron sendas ráfagas contra ambos cuerpos caídos.
Solo por un milagro este Entrerriano de pura cepa se podría haber salvado. y el milagro sucedió ya que el soldado que intentó rematarlo le disparó con su fusil en automático a muy corta distancia, y el retroceso del arma tornó impreciso el fuego
Los ingleses lo creyeron muerto. Miguel tenia la imagen de El negro muy malherido, manoteo el fusil que tenia al lado soltó una ráfaga de fuego contra los soldados enemigos, vaciando un cargador entero. al ver desplomarse la fila de los ingleses, creyó que estaban cuerpo a tierra, cambió el cargador y volvió a liberar una ráfaga de fuego; Al terminar el segundo cargador, sintió una fuerte molestia en las piernas y al tocarse se percató de que estaba mal herido: “Estoy hecho un colador", las heridas si bien no eran muy graves podían comprometerse, el combate alrededor se seguía librando como pudo el Correntino los levanto a los dos del suelo y los arrastro al interior de la carpa medica.
Esa noche el aeropuerto fue defendido con uñas y dientes, con múltiples bajas una de ellas el querido Negro que había fallecido por sus heridas a Miguel lo reenviaron a continente para que sea atendido en Río Gallegos, así un Gurí que de apenas 18 años había partido a Malvinas volvía un Soldado y a la vez un hombre, este mes y monedas defendiendo un territorio que fue usurpado hace siglos le habían cambiado la cabeza. En su casa no hubo más bienvenida que su Familia, quienes al verlo llegar rompieron en un llanto que contenían desde ese mismo 30 de marzo que lo habían visto partir...

Hoy a 28 años los Argentinos no debemos olvidar, que esas islas por la que estos Gurises pelearon y se convirtieron allí en Hombres son nuestras y nunca debemos renunciar a su reclamo.. Mis mas sinceros Honores y gratitud para todos aquellos que defedieron la soberania de mi país en 1982 la lucha no termina VOLVEREMOS